Soy Chakana

Creo que inevitablemente nací, crecí y viví en una especie de burbuja. Cada uno tiene una burbuja distinta formada por la familia, el colegio, el barrio, incluso la ciudad, donde se forman las relaciones humanas, los amigos, los intereses, los sueños y los proyectos. En mi caso, salí un poco de esa burbuja cuando llegué a la universidad y el periodismo y la literatura expandieron mi campo visual. Las redacciones, la agenda a cumplir, las fechas de cierre y el último momento se mezclaron con las reflexiones de Cortázar, Saer, Rulfo, Asturias y Fuentes, entre tantos otros. Durante años seguí esta línea, con una actitud receptiva que fue despertando cuestionamientos y que un día me llevó a pensar en mi propia vida, en mi agenda y en mis ideas. Por momentos la ciudad me invadía y me planteaba constantemente cuál era mi lugar y mi función, hasta dónde llegaba el pueblo y la cultura de los que formo parte y ahí fue cuando inicié esta búsqueda de otras formas de trabajar, de comunicarme e interactuar con la sociedad, la tradición, la enseñanza y la historia y ampliar el horizonte sin imponer límites. Chakana para mi, es la posibilidad de canalizar todas estas inquietudes, curiosidades y posibilidades y concretar este sueño junto a personas con intereses parecidos y opuestos, pero abiertos a infinitos momentos de aprendizaje y crecimiento con el fin de encontrar en esta porción de tierra –nuestra porción de tierra- un modo de convivir entre los hombres y la naturaleza que no sea impuesto ni inerte sino uno en el que nos sintamos parte activa, creativa y fundamental.