sábado, 4 de julio de 2009

Una dulzura especial

Aunque la semana de la dulzura sea un invento marketinero, de pequeña, era mi festividad preferida.
A través de los años, esta celebración de amor y amistad fue involucionando al punto que antes una persona recibía en promedio entre 15 y 20 golosinas -con beso incluido y hasta a veces más deseado que la golosina en sí- y hoy en día ya casi ni se comenta.
A mi me gustaba porque era la ocasión perfecta para festejar con todos, acercarse a los que mirábamos de reojo y no había vergüenzas, sólo cachetes colorados.
Ahora al que menciona la semana de la dulzura lo tratan de noventoso y lo miran mal, como si fuera un caido del catre...
Quiero cantarle (o dedicarle, mejor) tu mamá debe ser pastelera para hacer bombones como vos al que se lo merezca, quiero repartir golosinas y besos, besos y golosinas y al que no le guste que se encierre en su casa, que se ponga barbijo y que lo mire por tevé.

8 comentarios:

  1. qué tanto le impide repartir besos y golosinas y cánticos?
    Saludos.-

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  2. no tengo idea. lo consulto con la almohada y vuelvo!

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  3. ahi va un cofler blanco (virtual) pero obsequio y golosina al fin...

    Exquisitos saludos rock en on.-

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  4. Es una ocasión ideal. Aproveche, aproveche.

    Y gracias por la dedicatoria.

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  5. pasan los años y no hacen más que comprobar que no hay con qué darle al Bonobon

    Y más en esta semana golosinera

    El Bonobón es imbatible, es el Maradona de las golosinas

    eee ooo eee bonobones con puré

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  6. alta semana de la dulzura!
    yo recibí un bon o bon y regalé un piquito. qué fácil soy.

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  7. altísima!
    y yo regalé un bonobón y recibí un piquito! buen negocio

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  8. alto ahí. me meten los cuernos hasta por blog.
    pikitos? bonobones?
    ah no viejo, asi no eh, asi no.

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